miércoles, 29 de abril de 2009

La sartén del paro

Dice el CIS que decimos el 76,2 por ciento de los ciudadanos, que nuestra máxima preocupación a día de hoy es el paro. Y dice el CIS que este porcentaje es récord en la historia de las encuestas de este organismo. Dice la CEOE que si no hay importantes reformas, el próximo año ya no estaremos hablando como ahora de que 17 de cada 100 ciudadanos en edad y con capacidad para trabajar están en el paro, sino que habremos alcanzado la cifra de 22. Es decir, uno de cada cinco. Dice David Taguas, que fue el máximo asesor monclovita en materia económica de Zapatero durante su primer cuatrienio, que si el gobierno no reduce los impuestos que gravan el empleo, en la primavera de 2011 estaremos por encima del 22,2 por ciento de paro. Y para la misma fecha, dice el Instituto Flores de Lemus que será una décima más. En todos los cálculos la misma cifra maldita de los cinco millones de desempleados. Lo mismo que dicen los organismos no estrictamente gubernamentales de España y todos los internacionales. Así, dice la Unión Europea, que de marzo a marzo en España hay 1,8 millones más de parados, cuando resulta que sumando el resto de países de la UE el desempleo generado ha sido de 1,2 millones. Dice cualquiera con un mínimo de sentido común, que lo malo de las cifras y las estadísticas no son los números en sí, sino el cúmulo de situaciones personales y sociales que representan. La realidad subyacente. Y si hoy son ya un millón y medio los parados sin prestación y un millón las familias con todos sus miembros en paro, pongámonos en la situación de cuántos serán dentro de un año y el tiempo que algunos de ellos llevarán así. Estando así las cosas, sorprende que los que menos digan sean los sindicatos mayoritarios. Y se equivocan al asumir el riesgo de compartir una responsabilidad que no les corresponde. Las mismas organizaciones que hicieron huelgas generales a los gobiernos de González y Aznar en situaciones de menor destrucción y de creación neta de empleo respectivamente, ahora ni siquiera se atreven con claridad a exigir medidas con motivo de la celebración del 1º de mayo. Y eso que uno de los argumentos más esgrimidos en los últimos años, el de la precariedad y la temporalidad excesivas, ha quedado brutalmente desfasado. Sólo en el primer trimestre de 2009, el empleo temporal también se ha desplomado un 24 por ciento. No es que la huelga sea el camino. Casi nunca lo es, pero si los sindicatos no quieren achicharrarse también ellos, deberían adoptar una actitud diferente. Limitarse a reclamar protección para los parados, sin exigir y buscar medidas que frenen la destrucción de empleo, es como empeñarse en freír huevos sin poner aceite en la sartén.

domingo, 26 de abril de 2009

Glosario de una semana de Abril

Aguilar, Rosa. Izquierda Hundida. Llamazares entregándose a Zapatero los dejó más que tocados. Un plato de lentejas en forma de Consejería se lleva a la alcaldesa de Córdoba, aunque nunca ganara unas elecciones. Tocados y hundidos. Salvo las reservas de Zamora y pocos sitios más, I.U. entona su canto del cisne. El comunismo, demodé; el ecologismo, aparcado hasta que pase la crisis; y los sociatas pescando donde pueden para no perder aún más posiciones. Necesitan un Anguita. ¿Podría llamarse Laura? Berlusconi. Primer Ministro italiano. Líder del partido Pueblo de la Libertad. Dueño del Milán de fútbol. De los tipos más ricos de Europa y empresario televisivo famoso por las “mamachicho”. Hace un “casting” entre modelos, actrices y presentadoras, todas de muy buen ver, para llevárselas no al huerto, sino a Europa. Le han llovido las críticas. Pero ¿hay tanta diferencia entre su criterio de selección y el que en muchas ocasiones practican nuestros partidos “serios”? Como los demás, busca para completar lista, candidatos cómodos, manejables, sobre todo obedientes y preferiblemente mujeres, que está mejor visto. Qué mejor si además son guapas y simpáticas, ¿o no? Criterio discutible, pero revisen la lista de PP y PSOE y ausculten los méritos por los que se integran algunos nombres. Blanco, José. Antes Pepiño. Retrasa aún más los plazos para la llegada del AVE. Anuncia que cambiará los proyectos malos de Maleni para volver a la idea buena de Cascos de que el AVE sea, como su nombre indica, de alta velocidad. No de velocidad intermedia, como se planteaba para algunos tramos en los proyectos actuales. ¡Bien por Blanco! Pero que agilice los trámites de un servicio que tendría que haber entrado en funcionamiento ya este año. Paro. Más de cuatro millones. Dos millones más que hace un año. Un millón de familias sin ningún miembro con empleo. No vamos a caer en el catastrofismo, dice De la Vega. Pensé que ya estábamos en la catástrofe. Vamos para cinco millones. Pepe. Salvaje que si jugara en el Getafe y hubiera agredido como el martes, a un famoso del Madrid o del Barça, sería sancionado para varios años. Tendría que abandonar España o el fútbol. Como mancha el uniforme de un club grande, sólo diez partidos (dos meses y medio). Marcelo impune. ¿Juego limpio y sin violencia? PGOU. Michael Ende escribió “la historia interminable”. Se anula el convenio con el que se ha redactado el nuevo documento. Dice el juzgado que tendría que haber sido contrato. Cuestión de tramitación y de interpretación. El documento está aprobado, es válido y como tal el Ayuntamiento habrá de pagarlo y avanzar hacia su aprobación definitiva con la aceptación generosa de alegaciones. Rural, Caja. Con “C” no de crisis, sino de Cipriano, su Director General. Buenos resultados. Buenas perspectivas. Buena estrategia. A veces en Zamora se hacen bien las cosas. Enhorabuena. Villalar. Pues vale.

miércoles, 22 de abril de 2009

Un Picasso del Siglo X

En cierta ocasión, durante la inauguración de una exposición de pintura, charlaba yo con un conocido pintor zamorano. Entre anécdotas y comentarios sobre el mundo de la creación artística, deslicé la cita que se atribuye a Picasso aunque otros sitúan en Baudelaire, “cuando llegue la inspiración, que me pille trabajando”. Me sorprendió la celeridad y lo rotundo y cortante de sus palabras al decirme, refiriéndose a Picasso, “ese señor era un sinvergüenza y un caradura”. Sobre los argumentos con que desarrolló su tesis no me extiendo, pues tiende la memoria a difuminar el contorno de los recuerdos y el verdadero sentido de las palabras que describen una idea ajena. Sólo lo traigo a colación a raíz de que aquel encuentro vino a mi mente al leer en el periódico, que Picasso pudo haberse inspirado en las ilustraciones de una biblia del año 920 al pintar el Guernica. En concreto, se refiere a las dos imágenes con más fuerza y personalidad de la que se considera una de las mejores obras pictóricas del siglo XX y probablemente la más simbólica. Las cabezas del toro y el caballo. Viendo las imágenes de la biblia, que curiosamente estuvo expuesta en París por las mismas fechas en que se pintaba el Guernica, no parece arriesgado hablar de plagio más que de inspiración. Los científicos que han descubierto la coincidencia afirman, como cualquiera que aplique un mínimo de sentido común, que la similitud es tan clara que no puede deberse a la mera casualidad. Y si quitándole al Guernica esas dos piezas lo convertimos en un cuadro ciertamente mediocre, quizás resulte que iba a tener razón el pintor con el que aquella tarde conversé. Podemos estar ante una de las mayores tomaduras de pelo del arte contemporáneo. O con un término que se admitirá a partir de la próxima edición del diccionario de la Real Academia, estaríamos ante un “bluf” (según anticipo de la RAE, persona o cosa revestida de un prestigio que posteriormente se revela falto de fundamento) de colosales proporciones. Sí ya sé que por decir estas cosas, automáticamente algunos te tachan de ignorante supino. O de reaccionario. El arte contemporáneo goza del privilegio de la inmunidad más absoluta, entre otras cosas, porque sólo los “iniciados” están autorizados a juzgarlo y consecuencia sin duda, de que la historia del arte dejara de ser, hace más de cien años, la historia de la belleza. Desgraciadamente Picasso no vive para poder defender la originalidad de su obra o para reivindicar, como la ilustre copista Lucía Etxebarría, su derecho a la “intertextualidad”, en un cuadro que, según está documentado hizo, sin demasiado entusiasmo, por encargo del gobierno de la 2ª República. O sea, quizás pintó el cuadro para cubrir el expediente sin pensar en el mercadeo posterior de los marchantes y la trascendencia que éste iba a tener. Hace tanto que todo está inventado, que no es de extrañar que ya en el siglo X, se hiciera pintura contemporánea.

domingo, 19 de abril de 2009

Promesas, para cumplirlas

Presumía Enrique Tierno Galván, de que tanto su pensamiento filosófico como su actitud ante la vida seguían el ideal “cínico” al estilo de los clásicos. En ese contexto pronunció una de las frases más emblemáticas de la transición política española sin rubor y con provocadora desvergüenza. “Las promesas están hechas para no cumplirlas”. De haberlo dicho alguien con menos predicamento progre, ni el más grande de los paraguas que han desfilado este abril lo hubiera librado del chaparrón de imprecaciones que se le hubiera venido encima. Al proceder del “viejo profesor”, la expresión cayó en gracia y más de uno que estaba “al loro”, se acogió desde entonces a su protección para justificar comportamientos posteriores. La víspera del inicio de campaña de las municipales de 2007, el Presidente Zapatero, sin que nadie se lo pidiera, anunciaba en un mitin en Zamora que traía bajo el brazo un centro de producción de la multinacional tecnológica Softtek con 300 puestos de trabajo. Desde entonces y a pesar de que los plazos iban transcurriendo sin que el proyecto se viera avanzar, los dirigentes socialistas provinciales han seguido ratificando ese compromiso que en su día Zapatero dijo respondía a “una especie de deuda que tenía consigo mismo”. A ver quién es el valiente entre sus filas que sale y pone la cara para decir que Zapatero ofreció algo que no dependía de él y que la multinacional sólo contemplaba como una hipótesis más de trabajo. Incluso ahora que ya definitivamente sabemos que no se instala, en lugar de reconocer el error de vender la piel del oso antes de haberlo cazado, por muy golosas que fueran las fechas electorales, se adentran en el callejón sin salida de los subterfugios. Se equivocan Hernández y los suyos al negar la evidencia en vez de reconocer que la promesa del líder no se cumplirá. Se equivocan con carácter general los políticos cuando hacen promesas a la ligera. Y a veces nos engañan comprometiéndose a objetivos que saben de antemano, no cumplirán. Chaves, en Andalucía, ha sido un ejemplo hasta simpático de este último comportamiento en diferentes citas ante las urnas. Sus promesas, tan peregrinas como vacaciones gratis para las amas de casa, una casa para todos los andaluces que ganaran menos de 3.100 euros al mes, paga para las amas de casa o ascensores gratis para los edificios con más de 3 pisos. Las inversiones y los empleos, no los traen los gobiernos, afortunadamente, sino la decisión y el interés de las empresas. Sostener lo insostenible es tan cínico como ejercitar la frase de Tierno. Hay promesas hechas de buena fe con la convicción de su cumplimiento y que por imponderables no se alcanzan. Esto no es especialmente reprochable si al menos quien ha incumplido lo reconoce limpiamente. Exijamos eso sí, que a priori las promesas, también en política, se hagan para ser cumplidas.

miércoles, 15 de abril de 2009

Del Partido de Pepiño

Es importante para Zamora que José Blanco sea el nuevo Ministro de Fomento. Al menos por una vez, se percibe unanimidad en partidos políticos y agentes sociales. Así que ahí tenemos a “Pepiño”, quien no fue capaz de que los tres mil vecinos de su pueblo le dieran la confianza para ser su Alcalde, convertido en la gran esperanza para el desarrollo de las infraestructuras del noroeste español. Zamora y los zamoranos, incluidos. Dicen y es verdad, que Zapatero no ha aportado más que el fantasma del Plan del Oeste a esta su tierra. Ni siquiera en León se ha notado el efecto de su mano benefactora. Yo prefiero Ministros a Presidentes, que éstos han de estar por encima de todo y aquéllos son los que en verdad asignan las pelas y ejecutan las inversiones. Estaba yo en estas de constatar el entusiasmo con el que se le recibe, que no pude por menos que pensar en que si siendo gallego lo vemos así, qué no pasaría si fuera zamorano. ¿Y sabes, amigo lector? Estaríamos mucho menos complacientes. Somos así. Siempre esperamos que la salvación venga de afuera y oye, que sigue sin llegar. Lo que más me ha sorprendido, si es que en política aún queda espacio para la sorpresa, es la reacción de los máximos representantes provinciales de los dos grandes partidos. Ahí sí que no me cuadran ciertas cosas. O sea, que ambos están convencidos de que Blanco por ser de Galicia va a tirar más para su tierra que para otras. Como nosotros estamos de camino nos vamos a beneficiar, dicen unos. Como Blanco conoce bien las necesidades de Zamora, se va a esmerar especialmente en atenderlas, dicen otros. ¡Qué tíos! Acaban de descubrir el atajo hacia la prosperidad. Seguro que ante su recién desvelada clarividencia, los dirigentes populares y socialistas olvidarán sus intereses personales y aun a riesgo de quemarse, empezarán a enfrentarse a quien haga falta en Valladolid y en Madrid para que siempre haya en los altos cargos de partido o institucionales, políticos de Zamora. No me refiero a aquellos a quienes por casualidad “los nacieron” aquí y nunca más volvieron a asomar el pelo. Tampoco a aquellos otros que encontraron vinculación escarbando en sus ancestros. Digo, políticos hechos aquí, residentes aquí y que conozcan lo de aquí. Sería una novedad que en vez de quedar tuertos por ver al de al lado ciego, promocionáramos a los cercanos aunque nos sean antipáticos. Desde Carlos Pinilla para acá, los zamoranos que ocuparon puestos con capacidad ejecutiva llegaron siempre desde otros sitios, nunca salieron de entre nosotros. ¿Desde dónde? En el PP, Ana Pastor, Ministra, desde Pontevedra. Folgado, Secretario de Estado, desde Madrid. Vallvé, Consejero, Bruselas. Las Consejeras Valdeón y Alonso, Salamanca. Los Secretarios Generales de Consejería, Ferreira y Jesús Julio Carnero, Salamanca y Valladolid respectivamente. En el PSOE, Carlos Romero, desde Madrid. Miguel Alejo, León. Fernando Benito, Burgos. Ahora sí, todos con Pepiño.

domingo, 12 de abril de 2009

Un caballo blanco

Me ha parecido de lo más sugerente en los últimos días, que haya sido nombrado nuevo Vicepresidente para la cosa de las Autonomías, Manuel Chaves. Tras diecinueve años de ejercicio en su baronía regional, tiene ahora la encomienda de sujetar la brida a los que hasta el martes eran sus colegas presidentes en la nueva España de las Taifas. Durante el reinado chavista, Andalucía ha recibido casi la cuarta parte de los fondos destinados por España y por la Unión Europea a las administraciones autonómicas. Mientras otros como catalanes, vascos y gallegos exigían con gran publicidad y alharacas trato discriminatorio en su propio beneficio, Chaves lo conseguía en la sombra, sin levantar la voz. Con la fuerza de ser la Comunidad que más votantes aporta a las urnas cada vez que a ellas se nos convoca. Sugerentes han sido sus primeras declaraciones anunciando a los desbocados corceles regionales que ha llegado la hora de los recortes. Que ya no hay grano para alimentar el banquete del gasto sin límite al que todos, incluido él, se han acostumbrado y que hay que conservar las herraduras porque no estamos para andar cambiándolas al menor desgaste. Parece que Zapatero ha buscado un caballo blanco que lo ayude a salir del atolladero en que se ha metido con el sudoku de la financiación autonómica y su tendencia irreprimible a decir sí a todo. Aunque conociéndolo, tal vez en lugar de un caballo blanco, lo que buscaba era un Caballo de Troya. Ya sabemos que no hay mejor cuña que la de la misma madera y va siendo hora de que alguien ponga freno al desequilibrio con el que actúan los gobiernos autonómicos frente al de la Nación o las paupérrimas, olvidadas y despreciadas entidades locales. Pero pensar que Chaves pueda ser la pieza adecuada para conseguir ese fin requiere unas ingentes dosis de fe y optimismo. Si por algo se ha caracterizado su gobierno en Andalucía ha sido por el mal uso de los fondos. Por la orientación de su gestión a mantener el voto cautivo. Por el ejercicio abundante del nepotismo y el enchufe. Por mantener a Andalucía como la región más pobre y con menor renta de España. Y porque si hace dos décadas había 700.000 parados hoy hay más de un millón, con una tasa de desempleo que se estima llegará en breve al 27%. Sugerente es también que como el que tuvo, retuvo, a las pocas horas de que De la Vega dijera que todos los nuevos ministros dedicarían el puente a trabajar en sus despachos, él ya paseaba, pantalón corto y camiseta, por una playa onubense. Que una cosa es colocar brida o ronzal a otros y otra muy distinta que te la pongan a ti. De día y con fotógrafos va a pie. Para ir entrenando, quizás a la luz de la luna recorre la playa montado a caballo.

miércoles, 8 de abril de 2009

Procesiones

Vivimos días de Procesiones. Con ellas como cada año, Zamora renueva sus votos más personales, más colectivos, más identificativos, más definitorios de lo que es nuestra ciudad. Ninguna otra celebración o conmemoración describe tan bien la personalidad del zamorano. Con ninguna nos fundimos como con la Semana Santa. Las trifulcas más o menos calladas de las semanas o meses previos dan lugar a la máxima concentración de todos los partícipes para que todo salga bien, para que todo brille aunque no haya sol. Todos a una sola voz, los directivos de las diferentes cofradías olvidan rencillas, envidias y enfrentamientos. Los cofrades ya no critican a quienes los dirigen democrática o caciquilmente, que de todo hay en la viña del Señor, sino que presumen de las virtudes del desfile propio, siempre más lucido, más organizado, más vistoso que los otros. Los hermanos de paso se preocupan de salir, avanzar, bailar y entrar bien al término de la procesión. El conjunto de los zamoranos mira al cielo pidiendo que no llueva y de reojo al reloj para llegar a tiempo al lugar elegido para la comunión con los cofrades, las Imágenes, el Gregoriano o las esquilas del Barandales. Después todo volverá a ser igual, pero mientras tanto, Zamora exudará un aire nuevo. Siempre recomiendo a los visitantes que a Zamora vengan en Semana Santa y vuelvan en cualquier otra época del año. Cuando lo hacen, siempre me cuentan que es verdad que hay dos Zamoras completamente distintas y que incluso nosotros, también hablamos de manera diferente de nuestra ciudad en uno u otro momento. No sólo es que las calles estén llenas de gentes, ora paradas, ora en movimiento. No sólo es que huele a garrapiñadas y a dulces. En estas fechas somos ordenados y disciplinados, orgullosos y altivos, competitivos y a la vez colaboradores y solidarios. La Semana Santa toma vida propia en Zamora. Como si de la esfera de un reloj se tratara, la aguja del tiempo va poco a poco marcando los hitos en su camino. Llegó, casi sin esperarlo, el traslado del Nazareno e ipso facto ya era plena Semana Santa con el viernes de Dolores. El pregón, magnífico de Felipe de Castro, nos contó lo que mil y una veces hemos sabido, oído, mamado, contado y sin embargo como cada vez, era nuevo, fresco, estimulante. Nos anunció lo que de todos es conocido pero a la vez aportó luz a nuestra siempre inmensa ignorancia. Palabras cosidas al papel con la delicadeza del orfebre, luego declamadas con teatralidad. En voz alta, para que todos lo oyeran y que paradójicamente nos introdujeron en el silencio que hoy se ofrece y que nos acompañará hasta que el domingo la muerte sea vida. El tormento, Resurrección. Hemos cubierto la primera etapa, la más íntima, pero nos queda lo mejor, lo que hace que seamos distintos y sin embargo, más nosotros mismos.

domingo, 5 de abril de 2009

La herencia. Cantilena

Descubrí en García Calvo y ratifica la Academia que es más correcto en nuestra lengua llamar cantilena y no cantinela a la repetición molesta e inoportuna de algo. Pues bien, una de las cantilenas constantes del presente mandato municipal es la mala herencia económica que habrían legado los precedentes gobiernos del partido popular en la capital y que sintéticamente titulan “la herencia de Vázquez y Macías”. La copla la interpretó durante años la oposición. Quizás como vía de escape ante la incómoda realidad de tres mayorías absolutas consecutivas, ciento cincuenta millones de Euros invertidos en la transformación de la ciudad de Zamora y doce años de congelación tributaria, que nos han situado a los zamoranos entre los españoles que menos pagan por tasas e impuestos municipales. Tras las últimas elecciones, letra y música se incorporó con agrado y sin contraste, al repertorio de algunos camaradas columnistas y sorprendentemente, de una pequeña parte del nuevo equipo de gobierno. Éstos últimos, como si vaticinando futuras heridas, fueran ya aplicándose apósitos. Un miércoles hace casi seis meses, escribí en el “Espejo de Tinta”: “En cuanto a la tan falsa como manida por unos y otros, argumentación del “alto nivel de endeudamiento” del Consistorio, me apuesto ahora mismo con Carlos Hernández a que no cita en España, cinco ayuntamientos de capital de provincia con menos deuda que el nuestro”. Días después coincidí con él y Andrés Luis Calvo en Santa Clara. Nos detuvimos en breve tertulia durante la que reiteré mi apuesta. Quizás para facilitarle la labor, a él y a los demás, el Ministerio de Economía acaba de publicar por primera vez los datos oficiales de deuda viva de todos los ayuntamientos de España (se puede consultar y descargar en la web oficial, www.meh.es). Sólo Bilbao, Las Palmas de Gran Canaria, Huesca y Soria están por debajo de los algo más de 19 millones de Euros de deuda de Zamora. Cuatro capitales de las que Bilbao no es del todo equiparable habida cuenta de las especiales características del régimen de financiación de País Vasco y Navarra. Claro, se podrá decir que Zamora es pequeña y no se puede comparar con las cifras de ciudades más pobladas. También en eso tengo que darle las gracias en esta ocasión a Solbes. El estudio incluye los datos oficiales de población de cada municipio y si dividimos el total de deuda por el número de vecinos, resulta que la deuda por cada zamorano es de 291 Euros y, que dejando al margen a vascos y navarros, sólo en Cáceres, Toledo, Las Palmas y Huesca la cifra es inferior. Con estos mismos cálculos, la deuda por habitante de la capital es también inferior a la de los residentes en ciudades como Benavente o Toro. Espero volver a compartir pronto mantel con Hernández y con aquellos otros que quieran apuntarse. Eso sí, pagamos a pachas, que anda Garzón con su propia cantilena.

miércoles, 1 de abril de 2009

París con su Dama

Salvo para algún “friki” que al oír nombrar París le venga a la mente la imagen de Paris Hilton vestida de rosa o hablando por el móvil, no hay ciudadano en el mundo que no ilustre automáticamente tal mención con la poderosa imagen de la Torre Eiffel. La Dama de Hierro, como también se la llamó es, al lado de las pirámides de Egipto, una estilizada jovencita que sin embargo ayer, cumplió ciento veinte años, siendo el símbolo único e inequívoco de la ciudad del amor, aunque, otra paradoja, se encuentre enclavada en pleno Campo de Marte que no es dios del amor sino de la guerra. Quién les iba a decir a quienes pidieron la interrupción de su montaje en 1887 y lo calificaron de inútil y monstruoso, que más de un siglo después no habría visitante de la capital francesa que pudiera rehuir a su encanto, pareja que no la buscara para besarse, ni cámara fotográfica que no retuviera su imagen. Cuántos pintores, literatos o gentes del cine la habrán convertido en espina dorsal de sus creaciones a pesar de que la Academia francesa de las Bellas Artes, Alejandro Dumas hijo, y algunos arquitectos y pintores la tacharan de agresión a la ciudad. La Torre, tal vez no sea bella de acuerdo a los cánones tradicionales, pero pocas creaciones del hombre sugieren nada más verlas en una fotografía, tanta magia, música, luz y primavera como la que hizo famoso a Eiffel. Dicen que los ciudadanos se dividieron ante su construcción, a pesar de presumirse efímera y también ante su previsto desmontaje en 1900. ¿Nos suena, verdad? Sus más de 300 metros de altura y las miles de toneladas de hierro y tornillería tuvieron que hacer temblar los cimientos de la sociedad parisina y resquebrajarse las certidumbres preexistentes sobre cuál era la estampa de su ciudad. Y sin embargo, ahí está. El paso del tiempo le fue dando más fuerza, más carácter hasta el punto de que su sola presencia engulle al conjunto de la urbe que la acoge. Cómo podríamos explicarles a sus detractores, pensarían en algún momento sus defensores, que la estampa urbana está en constante evolución y que no es lo malo lo que se construye, aunque a veces sea arriesgado y rompedor, sino lo que se deja morir por falta de actualización. Ya vemos que los que vivimos en ellas, consideramos a las ciudades como nuestras y a menudo nos ofende cualquier transformación a las que se las someta. Bien están siempre los debates sobre su fisonomía, pero hemos de saber que sólo el paso del tiempo, a veces largo, podrá decir quién tenía razón cuando se discutía. ¿O no sería lo mismo ahora, imaginar un París sin su Dama que un año sin su abril?